martes, 8 de octubre de 2013

V Botamarges

 
 
Este sábado se celebró la V Botamarges, una carrera familiar por el cariño que le ponen sus organizadores, pero a la vez una carrera que está cogiendo un protagonismo importante en el calendario, ya que sólo hay que ver que en menos de 48 horas se agotaron las 450 inscripciones. Para mí es mi cuarta participación y como en las anteriores, la disfruté muchísimo desde el principio. 

Suena el despertador a las 3 de la mañana y a las 3:30h. rumbo para Forna. Llego sobre las 5 de la mañana y ya se respira ambiente de carrera. Los participantes van recogiendo los dorsales y se van preparando para la aventura. Para algunos se nota que es su primera carrera en esta distancia y se notan los nervios. Otros preparados para disfrutarla una vez más y cada uno con su objetivo en mente. Yo tenía ganas de arriesgar y quería intentar bajar de las 9 horas, así que a ponerse el traje de faena y a empezar a tirar desde el principio.

 

La prueba recorre al principio unos 2 km. de asfalto donde se puede ir rápido porque pica un poco hacia abajo. Así que toca tirar un poco para pillar posición durante la subida, ya que arriba empieza una senda en la que no se puede adelantar. A mitad de subida me encuentro a Ferrús con el que compartiría recorrido hasta el km. 18 aprox. justo en la subida de la Safor. Pero la cosa no empezaba bien porque cuando encendimos los frontales nos dimos cuenta de que no habíamos cargado las pilas, ¡¡pero ninguno de los dos!!. Vaya panorama se presentaba antes de la bajada por la senda. Así que nos toca ir detrás de alguien e ir con cuidado para no caer. Después de sufrir mucho en la bajada llegamos a Villalonga, que es el primer punto de control, y aquí marcamos un tiempo de 1:29 h., casi 10 minutos menos que el año pasado. 

Ahora cogemos la Via Verde del Serpis y aunque va picando para arriba, son 8 km que los hacemos a buen ritmo y llegamos a los pies de la Safor en 2:15h. Aquí empieza la subida más fuerte del día, ya que ganaremos unos 800m. positivos en apenas 3 km. Cuando empezamos a subir Ferrús se empieza a ir y ya no lo vería hasta la meta. Así que decido coger mi ritmo y llegar hasta cima con las piernas lo mejor posible, porque queda aún mucha carrera.. En aprox. 1 hora llego a la cima y ahora toca una bajada muy técnica y con mucha piedra que nos llevará hasta el siguiente punto de control, la Font dels Olbits, en el km. 26,50.. Aquí aprovecho para comer y beber algo y en 3:42h salgo en dirección a Orxa, que es ecuador de la carrera. En este tramo seguimos bajando, y aunque no es tan técnico como la primera parte, también hay que ir con mucho ojo. 

Una vez en el avituallamiento de Orxa ya vamos en dirección a la tercera subida del día, que empieza por senda y una vez llegar arriba ya puedes coger tramo de pista donde se puede correr casi hasta el avituallamiento del km. 35. Ahora hay una larga bajada de 7 km, con 4 km. buenos por pista para correr, pero 3 km. también muy malos y con mucha piedra. Aquí voy adelantando algunas posiciones y veo que voy a llegar a Berrimama que es el km. 42 con buen tiempo para cumplir el objetivo. De todas formas fue en este punto cuando pegué el bajón el año anterior, aunque este año iba mucho mejor de piernas.

 

Llego a Benirrama en 5:57h, repongo algo de fuerzas en el avituallamiento y directo hacia la última subida importante de la carrera. El año anterior se me hizo muy pesada porque parecía que no acababa nunca. Este año cogí un buen ritmo y llegué arriba con ganas de lanzarme hacia Adzubia, que era el km. 53 y donde podría hacer mis cuentas para cumplir mi objetivo. Así que a pesar de que ya se van notando los km. en las piernas y que la senda de bajada está muy mal y te castiga muscularmente, voy bajando a buen ritmo y llego al pueblo en 7:30h. Voy con un adelanto de 30 minutos respecto al año anterior y contando que el año pasado hicimos en éste último tramo que me quedaba 1:40h y ya íbamos bastante tocados, pensaba que este año podría mejorar ese tiempo.
 

 

No me entretengo mucho en el avituallamiento y salgo cuando llevaba 7:36h. de carrera. Ahora venía quizá la subida más duele de toda la carrera, porque subes 175m. positivos, pero son muy verticales. Así que poco a poco llego arriba y ya me quedan 2 repechos de nada y ahora tenía bajada para tirar un poco. Pues en este momento fue cuando tuve la mala suerte de tropezar con una raíz y como imaginaba, se me subió el gemelo. Se me cayó el mundo encima porque sólo me faltaban 8 km. y esto no me lo esperaba. Estiro un poco y me pongo a correr, pero según voy avanzando se me va cargando y me toca ir parando a estirar. Estoy a una altura de carrera que me da igual que me cojan calambres en el gemelo o en las 2 piernas, así que toca sufrir y ya voy a por todas. Voy avanzando y me quedan 3 km y llevo 8:30.h. El gemelo me va molestando pero ahora ya me da igual, porque sólo falta subir al castillo y después ya tengo ahí la meta.

Llego a las puertas del castillo de Forna y sólo me quedan unos 300m. hasta meta y todo bajada. Voy entrando a Forna y se oye la megafonía. Veo el marcador del tiempo y a pesar del cansancio entro muy contento en meta en un tiempo de 8:52h y en el puesto 69 de la general. He bajado 44 minutos de mi mejor tiempo y a pesar de que ahora no puedo con mi alma estoy muy contento con el resultado. Así que si no pasa nada el año que viene volveremos a Forna a disfrutar de este ambiente tan espectacular.